El papel que se recoge en España equivale al volumen de 44 estadios de fútbol y supone el 71% del que utilizamos.
Los árboles son capaces de capturar CO2, contribuyendo así a la conservación de nuestros bosques y a la lucha frente al cambio climático.
La inversión puede promover empresas y proyectos bajos en carbono (energías renovables o eficiencia energética) que promuevan una economía respetuosa con el clima.